El templo de las ánimas Programa 150 Noche de historias an El templo con JESUS CALLEJO 5n64f

Hola que tal, muy buenas noches a todos y todas, esto es Radio Line, la radio de la
Antejuela Independiente, Alejandro Carmona aquí los habla y este programa El Templo
de las Ánimas, una vez más en directo. Puedes seguirnos a través de nuestra página
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de las plataformas de podcast que se te ocurra que exista como El Templo de las Ánimas.
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mundo. Recuerda que puedes suscribirte y activar la campanita para estar al día de todo nuestro
contenido como siempre, si quieres. Y en esta noche tan especial y tan mágica,
vestimos de gala para recibir a un investigador, a un contador de historias de los más grandes
y alucinantes que tenemos en este país con diferencia. Vamos allá que esto arranca y
vamos a disfrutarlo y a gozarlo esta noche que nos vamos a dar una vuelta por la España
mágica impresionante. ¿Qué me iba a decir a mí? Hace 25 años que comencé a escuchar las
historias de este hombre, que en una noche como esta yo tendría la oportunidad de hablar,
de hablar un ratito aquí con él y de entrevistarlo y disfrutar un poquito y
aprender de todos sus conocimientos. Investigador, escritor, divulgador,
director de la escóbula, de la brújula, ese mítico programa ya, colaborador en Ser historia
con Nacho Ares, con el cronovisor, Cuarto Milenio, Milenio 3, no sé, un sinfín de libros,
impresionante el currículum de este hombre y es una maravilla tenerlo aquí esta noche.
Jesús Callejo, Jesús, muy buenas noches. ¿Qué tal Alejandro? Muy buenas noches.
Oye, ¿cuánto tiempo llevas en esto de la investigación? ¿Me permites si te
defino como contador de historias? ¿Cuánto tiempo llevas contando historias?
Hombre, te lo agradezco. Yo me considero un contador de historias. Bueno, todos los que
nos dedicamos al mundo de la radio, al mundo de la comunicación, somos contaderos de historias.
Cada uno cuenta su historia, a veces basada en experiencias, otras veces basada en los estudios,
en los libros que uno ha leído, en lo que te han contado, pero yo creo que todos somos
tuicitalas, que es una palabra que me gusta, que es el nombre que le dieron en su momento
a Robert Louis Stevenson cuando tuvo que irse a unas islas del Pacífico precisamente por
problemas de salud, y entonces allí contaba sus pequeñas historias, basadas por supuesto
en sus cuentos y sus relatos, y me gustó siempre ese nombre, tuicitala. Yo creo que
todos somos tuicitalas, contadores de historias, contadores de cuentos y contadores, un poco,
muchas veces, de nuestras propias experiencias. ¿Desde cuándo estoy metido en todo esto? Pues,
a ver, siempre es muy complicado esto, porque una cosa es desde el momento oficial que publicó
mi primer libro, que era el de duendes, y otra es desde que yo ya empecé a investigar, a hacer
mis pinitos en este mundillo que llamamos la cultura del misterio, donde yo ya escribía
para artículos, revistas, en la universidad, en fin, este tipo de cosillas que yo hacía.
Entonces, resumiendo, podrían ser, échale unos 30 años para resumir, o sea, media vida,
es mucho más, me refiero, mucho más, porque por supuesto no entro ya, cuando yo era más joven,
que escribía mis obras de teatro, mis pequeños viajes, pero de una forma vamos a llamarla
pseudo profesional, 30 años. ¿Cómo se sigue manteniendo el entusiasmo 30 años después?
Bueno, porque es un camino de ida, no es un camino de vuelta. Yo creo que el entusiasmo es
que continuamente uno está con las antenas desplegadas para la sorpresa. Yo creo que no
hay nadie que se dedique a la investigación en general, hablamos del mundo del misterio como
si fuera una cosa reducida, el misterio es todo, el misterio es vida, el misterio es cultura.
Entonces, cualquiera que tengamos ese virus que se llama curiosidad, yo creo que...