El templo de las ánimas Programa 149 La noche de las pesadillas. 4 historias para no dormir 266b73

Hola que tal, muy buenas noches a todos y todas, esto es Radio Line, la radio de la
Antejuela Independiente, Alejandro Carmona que nos habla y este programa El
Templo de las Ánimas una vez más en directo. Puedes seguirnos en nuestra
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cualquiera de las plataformas de podcast que se te ocurra que exista como El
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y desde cualquier lugar del mundo. Recuerda que puedes suscribirte y
activar la campanita para estar al día de todo nuestro contenido como siempre
si quieres. Y en esta noche propicia, en esta noche de lluvia, de frío, vamos a
disfrutar, vamos a inaugurar, a estrenar una nueva serie aquí en el programa que
se llama La noche de las pesadillas con cuatro historias que quizá os quiten
esta noche el sueño. Y para ello contamos en el programa con gente como
siempre magnífica y extraordinaria que se ha dejado el alma para hacer algo
realmente precioso, mágico y aterrador. ¡Agarraos que arrancamos ya!
Y como os digo en esta noche propicia para este tipo de historias, no estaré
solo, van a estar conmigo aquí mis grandes amigos, grandes escuderos, grandes...
bueno, es que llamarlos, llamar los colaboradores nuestros son parte del
equipo, porque sin ellos esto no sería posible. Y las cosas son así y así me
gusta decirlas y es de bien nacido ser agradecido, ¿no? Y esta gente ha currado y
esta gente trabaja por un sueño, por una ilusión, por comunicar y por pasarlo
bien. Y ellos no son otros que Santiago Cerro desde el lugar de la Mancha
Santi. ¡Buenas noches! ¡Buenas noches queridos templarios
ánimos y ánimas! ¡Buenas noches! Alejandro, muchas gracias por volverme a
invitar. Sabes que es un placer pisar el palomar siempre que me avises.
Y por otro lado tenemos a nuestro amigo, a nuestros kielnenses, al jezireño de
adopción, a nuestro filólogo, poeta y escritor Ismael López. Ismael, ¿qué tal?
Muy buenas noches. Muy buenas noches, Alejandro, muy buenas
noches a todos los oyentes. Acabas de decir que estamos persiguiendo nuestros
sueños en un programa como el de hoy, no sé si decir que estamos persiguiendo
nuestras pesadillas. Bueno, fíjate, voy a confesaros algo. Todas estas
historias que se van a poder oír esta noche no son más que errores
nocturnos míos, que yo vivía desde pequeño y fíjate
que ahora con los años me da por me da por versionarlo y contarlo de otra
manera. Pero fíjate, no todos tenemos nuestras propias
pesadillas, a todos nos han contado historias que nos daban miedo. Me imagino
que a vosotros también, Ismael, Santi. Sí, oye, yo quería pedirte si me das unos segundos
para entrar en materia y bueno y agradecer a alguien. Adelante. ¿Puedo leer?
Por supuesto. María regresó a casa con la cabeza llena
de preguntas, su mente atrapada entre las advertencias de Anaís, las palabras
crípticas de Dolores y los ecos de la campana de la moza de ánimas. Sentía
como si los misterios se apilaran uno sobre otro, como un muro que no podía
escalar. La casa estaba en penumbras y la única luz que filtraba era la de la
luna llena. Cerró la puerta tras de sí, intentando encontrar en la familiaridad
de su hogar un refugio para el caos en su mente. Pero algo no estaba bien. Había
una quietud diferente, una ausencia que le erizó la piel.