Radio TiR nº 217, 2025-02-14 Essential David Bowie 29655x

Da comienzo Radio Tear en Candil Radio, dirige y presenta Fran García.
Hola qué tal, damos la bienvenida a todas las personas que nos escuchan a través de las
ondas o a través de internet, comienza Radio Tear. Da comienzo de nuevo el programa que te
trae la mejor música de algún estilo musical, algún disco, algún artista o en este caso de
una trayectoria completa de un señor llamado David Bowie. Comienza nuestro Radio Tear de hoy
dedicado a David Bowie, pero no va a ser a David Bowie como tal y bueno pues porque sí, sino que
va a ser al Essential, que en su momento que os habla Fran García escribí en la revista Dizzy
Rock, además fue uno de los artículos de hace ya tiempo cuando comenzaba en la revista. Me
encargaron el Essential de David Bowie, un Essential complicado porque David Bowie es un
artista muy camaleónico, muy versátil y entonces digamos que reducir su trayectoria solo 10 discos
pues me resultó bastante complejo. No obstante quedé bastante satisfecho de lo que hice y bueno
pues ahora quiero repasar con todos vosotros, con todas vosotras lo que fue ese Essential.
Bien pues David Robert Jones, conocido en el mundo musical como David Bowie, fue en los 70 uno de los
artistas más influyentes del rock, además de un auténtico visionario en lo que se refiere a
tendencias cambiantes en la música. Tuvo un acierto brutal para adivinar por dónde iría la música en
un futuro próximo por lo que se le considera el iniciador de numerosos estilos musicales así como
el auténtico camaleón del rock como ya he comentado. Como siempre en el Essential voy a hacer una
pequeña introducción y luego entraremos ya de lleno en los 10 discos por orden inverso,
empezando por el décimo y terminando por el primero que conformaban ese Essential. Los inicios de David
Bowie en la música fueron tan dispersos como ignorados. Tras numerosos intentos por hacer
carreras formando distintos grupos, en 1967 decide probar en solitario con su primer álbum,
David Bowie, que apenas tuvo repercusión. Dos años después publicaría Man of Words,
Man of Music, disco en el que aparecía el single Space Oddity, de gran éxito en Gran
Britania. Este disco se volvería a publicar en 1972 con el nombre de dicho single, Space Oddity,
constituyendo uno de los álbumes que contribuyeron decisivamente a cimentar su carrera. Pero Bowie
en 1969 no estaba del todo convencido en lo referente a volar en solitario, por lo que se
unió a T-Rex con Mark Bolan, girando con él. Fue así como conoció a Mick Ronson y Tony Visconti,
hombres fundamentales en su futuro. En ellos encontró el apoyo necesario para retomar su
trayectoria en solitario. Así fueron saliendo una tras otra obras maestras definitivas del rock,
como The Man Who Sold the World, Hanky Dory, The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the
Spiders from Mars o Aladdin Sane. En esa época, su actividad abarcó también la producción de discos
como Transformer, de Lou Reed, Raw Power, de los Stokes y All the Young Dudes, de Muddy Hopper.
Tal actividad tuvo como consecuencia que Bowie acabase con su banda, The Spiders from Mars,
y se replantease su dirección musical girando hacia el soul, consiguiendo elaborar una joya
del calibre de Young Americans, que consolidó dicho estilo en la música de Bowie. Y precisamente
aquí es donde vamos a empezar a escuchar música. Young Americans, uno de los discos más pintorescos
de Bowie. Young Americans suena a Funky Soul o Plastic Soul, como lo llamaba el propio artista.
Ha sonido disco, pero la voz de David se nos muestra diferente a lo esperado, comentando
las canciones más que cantarlas. Se podría decir que este álbum es el preámbulo de Station to
Station, salvo por el hecho de que no tiene la diversidad musical que nos ofrece aquel. Dos temas
destacan en este LP, el que le da título y la comercialmente exitosa Fame, que a ritmo de
disco poderoso, no relata los inconvenientes de la fama y del éxito. Fue uno de los singles
más vendidos de 1975, demostrando el gancho comercial que Bowie atesoraba aún. En cualquier
caso, Young Americans fue el disco que sirvió de puente hacia la etapa más funky de David Bowie,
conjugando acertadamente su espíritu inquieto de la época.