CBP435 Batalla Acorazada en el Norte - ARDENAS 80 Aniversario 1t1y31

El Teniente General Kurnit M. Hoge, que estaba al mando del primer ejército de los Estados Unidos,
comentan que levantó la vista de sus mapas y lo que vio, pues la verdad que no le gustó mucho,
lo que vio era el caos, el caos por todas partes. A ver, estamos en el Bosque de las Ardenas y como
sabemos, en un momento dado, sobre todo al principio, las fuerzas norteamericanas se
están tambaleando, están viendo que la cosa no va muy bien. ¿Por qué? Porque ha habido un ataque
sorpresa alemán que se ha iniciado el 16 de diciembre del 24. A ver, según lo que había
podido saber nuestro amigo Hoge, había unidades, no sabía cuáles, de primera línea que estaban
aguantando, otras simplemente habían desaparecido, habían sido aniquiladas, salían corriendo del
bosque diciendo que viene el logro, que viene el logro y bueno, la que más preocupaba a Hoge yo
creo que era sobre todo una y era ¿cuál? El Kampfgruppe Peiper, que era en aquel momento
la punta de lanza de la primera división Panzer SS alemana. Se llamaba Peiper por su comandante,
era muy típico de los alemanes llamar a una unidad ad hoc por el comandante, en este caso
el teniente coronel de la SS Jochen Peiper. Esta poderosa fuerza se dirigía, o se sabía que se
dirigía, a una ciudad intersección, a la ciudad intersección de Lieja, que era la primera parada
que tenía que hacer este contraataque o este ataque alemán, según como queráis plantearlo,
en su camino a Amberes y a la costa belga. Y para hablaros de cómo vamos a parar a esta división
Panzer SS, a este grupo en Peiper, me he traído el amigo Felix. ¡Felix, muy buenas! Muy buenas, muy
buenas Esaú, ¿qué tal? Oye, esto es como la película, ¿verdad? Ya espero que Dani nos haya
puesto el Panzer X de fondo, ¿verdad? Pues sí, pues sí. Porque Peiper era un tío increíble. Pero la versión alemana, no la chilena.
Ah, no, por favor. No, no, no. No empecemos. Con esas cosas no se juega. Con las cosas de comer no se juega.
Oye, Félix, habían puesto toda la carne en el asador los alemanes, ¿verdad? Habían puesto lo más
moderno que tenían en el momento. Pues sí, pues sí. Luego veremos los carros que tenían y, bueno,
que tampoco les dio muy buen resultado, ¿verdad? A ver, es siempre lo que hablamos sobre la doctrina
alemana y lo que tú habías hablado muchísimas veces, cualquiera de los pocos que el dúo ha
corazado ha hecho. Calidad frente a cantidades. Yo puedo tener el mejor carro, pero si lo tengo
en pocas cantidades no voy a hacer milagro, ¿verdad? Exactamente, exactamente. Y luego hay una baza que
mucha gente, bueno, muchos contemplamos, que es el arma aérea, ¿no? La situación aérea en la que
los aliados tenían total y absoluta control aéreo desde Normandía hasta finalizar la guerra.
Sí, sí, quizás, y ya se comentó alguna vez, este ataque de los alemanes por las Ardenas les
funcionó en el año 40, pero en el año 44 no podía funcionar, más que nada, como dices tú,
porque los norteamericanos no son como los ses y eso que los ses, a ver,
nos vamos a reír, hicieron lo mejor que pudieron teniendo en cuenta las divisiones que había en
el año 40 en las Ardenas, sobre todo divisiones de segundo tipo, divisiones en las que, como siempre
digo el chiste, tú y yo seguramente hubiéramos estado felices allí, pero que nos pudieron detener,
por ejemplo, la séptima división Panzer, la famosa división fantasma de Rommel, pero claro,
ahora sí van a poder detenerlo porque contamos con gente mejor formada, con mejor armamento y
sobre todo, como dices tú, con el poder aéreo. Pero en tierra, cuando llegan las cosas gordas,
vamos a hablar de una unidad, ¿verdad?, de unos carristas, de unos conductores de carros que se
van a enfrentar con lo que tienen y eso es una cosa que llama mucho la atención a los alemanes,
y es que había unidades que no se desbandaban, que con lo que tenían, aunque fueran unos
antiaéreos, unos cañones sencillos o simplemente un grupo de fusileros, no se retiraba, sino que se
enfrentaban a ellos. Claro, el entrenamiento y el haber tenido experiencia previa hace mucho. Sí,
sí, sí, sí, o sea, si tú tienes claro que tú, aguantando, van a venir por detrás tuya unos
compañeros que te van a apoyar, si tú tienes claro eso, evidentemente vas a actuar de otra manera que
si tú crees que te van a dejar tirado, pues mira, no, si me vas a dejar tirado, me iba a decir una
barbaridad, mejor me la callo, el último, ¿vale? Entendiendo. Bueno, Félix, pues vamos a hablar un
poquito de cuál era la situación, cuéntanos cuál era el plan de Peiper y dónde tenía que llegar y
qué estaba pasando en todo el frente. Bueno, a ver, la situación era inquietante, inquietante o por lo
menos preocupante para los aliados, porque entre informes de rendiciones masivas en el frente y
comandos alemanes que hablaban en inglés y que supuestamente aterrorizaron, supuestamente lo digo
porque no todos los casos fueron, bueno, actuaron de esa forma. Oye, que iban a secuestrar a Eisenhower, que estaba en Palillos.
Sí, sí, sí, claro, claro. En la retaguardia del primer ejército,