Capítulo 53: Jon 566q4

John tormo botas gigantes no era alto pero los dioses le ven otorgado un pecho amplio y una pansa descomunal mans reiter lo había apodado soplado del cuerno por la fuerza de sus pulmones y desea que sus risotadas podían barrer la nieve de las montañas cuando broma enfadarse a john le recordaba el barrita arte un mamut aquel día toro bravo mucho y muy alto refugio grito y golpeó la mesa con tanta fuerza que derramó una jarra de agua siempre tenía mano un cuerno de miel de modo que escupía saliva dulce cuando cifraba amenazas le recriminó a jon snow que fuera un cobarde un mentiroso y un cambiar capaz lo mal dijo por ser un arrodillado de corazón podrido un ladrón y un cuervo carroñero lo acusó de querer joder al pueblo libre le arrojó dos veces el cuerno la cabeza aunque no sin antes saberlo vaciado mundo no era de los que desperdician serían un buen y miel yo no aguanto el chaparrón no levantó la voz ni respondió las amenazas pero tampoco serio más terreno del que tenía previsto al final cuando en el exterior de la tinta ya se alargan las sombras del atardecer norman bates gigantes o el gran hablador soplado del cuerno rompe dor de hielo niños de trueno marido de óseas rey del libro miel en el salón rojo portavoz ante los dioses y padre de ejércitos extendió la mano con decisión trato hecho y que los dioses me perdonen sé que hay un centenar de madres que no serán capaces yo un estrecho la mano que le ofrecía en su cabeza resonaban los votos de la guardia la espada en la oscuridad soy el vigilante del muro soy el fuego que arde contra el frío la luz que trae el amanecer el cuerno que despiertan los durmientes el escudo que definen los reinos de los hombres y añadió una frase nueva de cosecha propia soy el guardián que abrió las puertas para dejar entrar al enemigo habría dado cualquier cosa por saber que hacía lo correcto pero ya era tarde para echarse atrás trato hecho dijo el apretón de manos de mundo casi le rompió los huesos en eso no había cambiado también lucía la misma barba aunque la carga que ocultaba aquel matorral de pelo canoso había adelgazado considerablemente y profundas arrugas surcaban las mejillas enrojecidas mans debería haber matado cuando tu vocación dijo mientras ponía todo su empeño un reducida pulpa y huesos la mano de john oro por avena y los muchachos es un precio otros que fue de aquel muchacho encantador al que conocí lo nombrado comandante se dice que un negocio justo siempre deja ambas partes insatisfechas tres días si es que vivo tanto tiempo varios de mis hombres me escupir ana la cara cuando oigan estas condiciones liberó la mano de con los tuyos también protectora si no me equivoco y las conozco hemos estado más cuervos de los que recuerdo será mejor que no comentes eso cuando vengas al sur del muro en un río eso tampoco había cambiado aún seca barreira la mínima ocasión sabias palabras quiero que los cuervos me maten a picota esos dio una palmada en la espalda john cuando toda mi gente esté a salvo tras tu muro compartir hemos carne y miel hasta entonces el salvaje se quitó el brazalete del brazo izquierdo y se lo tendió a john luego hizo lo mismo con el derecho tu primer pago estos brazaletes de mi padre y el del suyo ahora son tuyos cabo donde negro los brazaletes eran de oro viejo sólidos y pesados grabados con las ruinas antiguas de los primeros hombres tormo mata gigantes lo llevaba desde que yo no conocía eran tan característicos de él como la barba los globos y es los fundirán para aprovechar el oro es una lástima quizá deberías quedarte los no quiero que se diga que tomó el puño de trueno obligó al pueblo libre entregar los tesoros mientras él conservaba los suyos sonrió pero me quedaré con la anilla que llevo en el miembro es mucho más grande que esas vaga telas a ti te quedaría bien en el cuello nos cambiaran nunca yo no pudo evitar reírse cambie la sonrisa se derritió como la nieve en verano no soy el hombre que eran el salón rojo he visto demasiado muerte y cosas aún peores mis hijos el rostro de thor mons se entristeció adoro mundo mataron en la batalla del muro solo obrero muchacho fue un caballero de rey